El acompañamiento es una actividad que consiste en que un profesional acuda junto con la persona atendida a realizar tareas fuera de su residencia habitual. Estos acompañamientos no solo sirven para facilitar la tarea a la persona, sino que se utilizan como un contexto de intervención en el que abordar ciertos elementos del Programa de Atención Individualizado como por ejemplo las habilidades sociales, la planificación de las tareas, puntualidad, etc. De esta manera se consigue un doble objetivo: que la tarea se realice con éxito (por ejemplo acudir a una cita médica) y mejorar las habilidades personales del paciente (esperar turno, pedir información, autonomía para realizar gestiones, etc.)
La metodología se basa en el establecimiento de un vínculo terapéutico entre la persona y el profesional, generando un grado de confianza entre ambos que facilita el trabajo a desarrollar. En cuanto a la práctica, el profesional y la persona establecen un día y una hora concreta para realizar una tarea determinada fuera del domicilio habitual.
En el transcurso de la ejecución de dicha tarea el profesional ofrece apoyo a la persona, proporciona información, facilitar las conductas más complejas y enfoca el trabajo en la búsqueda de la autonomía del paciente (el objetivo es dejar de ser necesario para realizar una determinada tarea.
Pedir citas, acudir a los servicios públicos, apoyo en la gestión de documentación
Realizar la compra semanal, compras puntuales, etc.
Actividades de grupo, centros culturales, lugares de reunión, etc.
Seguimientos médicos, acompañamiento en la cita, medicación, etc.